Con una sensación agridulce. Así llegó el lateral izquierdo Farid Díaz a la concentración de la Selección Colombia en Milán, Italia. 

El costeño llega en reemplazo de Frank Fabra, quien sufrió una lesión de ligamentos cruzados en su rodilla izquierda, dejándolo sin la posibilidad de disputar el Mundial. 

"Es una sensación entre alegría y un poco de tristeza", expresó el marcador de punta a los medios de comunicación. 

Díaz reconoció que no esperaba el llamado, pero afirmó que siguió trabajando en Paraguay, ya que se encontraba en la lista de 35 convocados, que había entregado inicialmente el técnico José Néstor Pékerman. 

"Estoy contento de estar acá y ahora voy a trabajar. Seguí entrenando en Paraguay y estaba tranquilo, deseándole un buen Mundial a mis compañeros. No me lo esperaba, pero estaba en los 35, uno trabaja para esto", indicó.

El nacido en el departamento del Cesar señaló que Pékerman lo hizo sentir como en casa apenas pisó el sitio de concentración. 

Respecto a la competencia que hay en el equipo y en especial en su puesto ante el lateral Johan Mojica, aseguró que se unió a la Selección para pelear por un lugar en la titular. 

"Mi fortaleza es la defensiva, también me va bien en los centros. La competencia somos todos y el que decide es el profe. Vengo a pelear por un puesto", sostuvo.

Por último, aseguró que esta era la última posibilidad en su carrera de jugar un Mundial. "Por edad, si no era esta oportunidad no había otra", concluyó.